Censo Agropecuario 2008 del MAG
De acuerdo al Censo Agropecuario 2008 del MAG, en el distrito se registran 1.220 fincas y una superficie censada de 9.387 hectáreas. Estas 1.220 fincas en su gran mayoría son unidades familiares (1191 compuestas por un solo productor y 29 están compuestas de 2 o más asociados de hecho, no se registran empresas), lo que representa una población rural de unas 6.000 personas aproximadamente (x5 miembros). Del total de fincas, 1.175 familias (96%) residen en el lote, de los cuales 813 familias (69%) desde hace 10 años o más, 179 familias (15%) de 5 a 10 años y 183 (16%) por menos de 5 años, lo cual indica que existe aquí un cierto arraigo a potenciar.
De acuerdo al Ing. Agrónomo contratado para implementar la asistencia técnica desde la municipalidad, se atendió en el 2011 a 18 comités de agricultores, que no están en PRODERS, lo que involucraría al 20% de los productores campesinos del distrito. Se busca fomentar la huerta familiar, la recuperación de suelo, la cría de peces. Con fondos de royalties, la municipalidad distribuyó 900 kilos de semillas para autoconsumo entre aproximadamente 250 familias. Se entregaron plantines y herramientas menores, en partes iguales de acuerdo a la cantidad de miembros de cada comité. Se distribuyeron para reforestación entre 6.000 y 7.000 plantines: 3.000 cítricos, 2.000 nativos y 2.000 exóticos (eucalipto y cedro australiano). Con los plantines nativos se perdió casi el 25% porque “la gente dice que tarda mucho”. Con las semillas de caña de azúcar, la meta es 1 hectárea por persona. Hay un comité San Agustín de 8 miembros, actualmente son 5 hectáreas, la idea es aumentar el área de cultivo.
Así también, se inicia un programa de recuperación de suelos, para lo cual se sacaron 16 muestras para análisis de suelo y se detectó que el porcentaje de acidez es muy elevado, de 8,5 a 9. La municipalidad colabora con cal agrícola y fertilizantes, de 1.500 a 2.000 kilos por hectárea. Para el próximo ciclo se quiere empezar con abonos verdes.
En cuanto a desafíos, se señala que “hay que tener paciencia con la gente, recién cuando ven resultados se apropian, hay que insistir con asistencia técnica y capacitación para la gente”. También sugiere evaluar y potenciar actividades como la piscicultura, con especies como el pacú que come maíz y frutales y la tilapia que consume balanceado que puede ser preparado en la finca. El dorado y el surubí son carnívoros. En la localidad de Zapallo, hay un señor que produce y vende tilapia y pacú.
También está latente el problema con el cultivo de la soja, hay que analizar la manera de regular el cultivo, “en los últimos dos años hay mucha queja de la gente porque siembran soja en las veredas” y frenar la venta de tierras de alguna manera, “hace 5 o 6 años atrás se compro casi el 80% del territorio en San Agustín”.